Wednesday, November 25, 2009

El Códice de mi Vida pues.

No he escrito en el blog desde hace siglos, la tarea, la flojera, la diva de mi computadora y el tuiter hacen que me sea imposible postear cualquier cosa. He tratado de escribir varios posts y nomás no me da tiempo pa' terminarlos, así es que por el momento se quedarán sin saber sobre mi competencia de natación, mi opinión sobre Niu Mun, mi entrada triunfal a Facebook, todas las pequeñas estupideces que han acontecido en estas ultimas semanas o mi reciente obsesión por la palabra "pues" (aunque de eso tal vez se darán cuenta a lo largo de la entrada).

Ni modo, se quedaran con las ganas.

De lo que sí leerán será del nuevo chistorete de mis maestros, otro trabajo larguísimo, teto, aburrido y que no me hará aprender absolutamente nada. Un trabajo común y corriente en la vida de un estudiante de secundaria pues. Estoy enfrente del boceto para dicho trabajo, cuyo pretencioso titulo basta para darse una idea de lo tonto que resulta; "El Códice de mi Vida".

Pfff…

El trabajo cuenta para tres materias: historia, arte y formación cívica y ética, es tonto, largo y tengo mucha flojera de hacerlo. Consiste en relatar mi vida en una especia de códice a base de símbolos en estilo de códice prehispánico, dibujar 5 escenas de mi pasado, 5 de mi presente y 5 de mi "futuro, goeee", así es que aquí estoy, como menso, pensando qué poner en el papel amate cuya compra fue toda una odisea (bueno, no tanto, nomás fui a la papelería y lo pedí), definiendo qué 5 momentos de mi pasado y presente merecen estar en un papelillo que según mis maistros representan mi vida.

¿Viajes? ¿Familia? ¿Escuela?

¿Qué pongo en el papelucho pues?

Pero la cosa se pone peor, ¿cómo espero que sea mi futuro?

Siempre he odiado es pregunta y más cuando de su respuesta depende mi calificación (school freak mode on). ¿Por qué la estúpida fijación de mis maestros por el "futuro"? ¿Quién se creen? ¿Mizada? ¿Walter Mercado? ¿Madame Sazú? (Sí, me la paso viendo anuncios en el nueve ¿y qué?).

No tener respuesta a estas preguntas me deja sólo una alternativa: hacer dibujos rechulos pa' que los maistros no se fijen en lo qué esta en el dibujo sino que en el dibujo itself. Me sorprende ser tan brillante pues.

PD: Tengo un corte de pelo nuevo y lo odio, lo que demuestra que la historia no es más que un ciclo interminable de hechos insignificantes. O que los peluqueros me odian.

Bái, pues.

Friday, November 13, 2009

De conversaciones vaciladoras/curiosas

Conversación I

Salimos de la Cineteca y mi papá y yo discutíamos las películas que acabábamos de ver. Yo decía que Parque Vía era una obra maestra, que Nueva York te amo tenía nomás poquitos momentos que valieran la pena y que The Baader Meinhof Complex era larguísima. Mi papá decía que Parque Vía parecía que estaba hecha con dos peso', que era aburrida y no le veía el punto, que Nueva York, te amo estaba dos tres y que The Baader Meinhof Complex le había gustado demasiado.

"Aquí en México existió un grupo muy parecido ¿sabías?"

"No, ni idea, ¿tú eras del partido comunista, no?"

"Sí y estuvieron a punto de reclutarme los de la Liga Comunista 23 de Septiembre"

"¿Quiénes son esos?"

"Los que te decía que son como los de la película"

"¿Cómo? ¿Un grupo terrorista?"

"Algo así"

"¿Cómo?"

Mi papá me contó cómo fue invitado a ser parte de un grupo revoltoso de estudiantes (que él mando bien lejos), me habló de cómo "entrenaban" a los que decidían unirse, de los "grupos de estudio" donde se leía a Marx y se estudiaba el comunismo, me dio una crónica a todo detalle de una manifestación en el aeropuerto por allá de los 80s de la que fue salvado por "el compadre" (un ñor malhumorado que era Jefe de policía), cómo fue casi corrido de su casa por andar de revoltoso y su pasado "comunista" (dígase en secreto pa' que nadie escuche).

Yo sabía poco de ese pasado "oscuro" de mi papá, pero siempre algo me hacía sospechar, tal vez su enfermiza obsesión por el Che, su gusto por la música de "protesta", sus años de metalero en la UNAM.

Me gustan ese tipo de platicas con mi papá, de lo que uno de entera…

Conversación II

Me salgo de la alberca, muerto por todo lo que acabo de nadar y es que es mi primera clase en un mes. Me pongo la toalla alrededor de la espalda para secarme, antes de irme me paro a hablar un rato con mi entrenadora.

Uy Saulillo cara de bolillo, regresaste bien flaco de Argentina, me impresionas.

Jajaja. Nah, es que no me has visto en mucho tiempo.

No, te juro que te veo mucho más flaco, hasta la cara se te ve más larga.

Uy sí, si no hice nada de ejercicio, me estoy muriendo de cansancio no ves.

A ver, quítate la toalla.

¿Qué? ¡¡¿Qué te pasa?!!

Ay, ni que te fuera a hacer algo, ándale, quítate la toalla.

(Me quito la toalla, ella me pellizca la panza y después de pensarlo un rato me pregunta, sin cambiar su tono de voz.) ¿Estás vomitando?

(Yo pongo cara de "WTF!") ¡Obvio no! (balbuceo algo sin sentido) Bái.

¡Pues ésta!


 


 

Me voy

¿Ya vieron al primer hater declarado del blog? Lo pueden encontrar (con todo y su mail) aquí.

Jijiji.

Friday, November 06, 2009

Guacareada verbal de un servidor o colección de tuits inéditos

Escribo esto muerto de frío, viendo el Piloto de Glee por 32948578930 vez, comiendo un alfajor argentino (que ni me gustan, pero traje demasiados) y estrenando los Crocs-Pantuflas simpaticones.

Tengo la impetuosa (impetuosisisima, diría yo) necesidad de escribir algo para el blog, he abandonado al changarrillo y eso-no-es-bueno amigos míos.

Pero no se me ocurre ningún tema algo interesante para escribir, nada, estoy en blanco.

Dado mi bloqueo y la poca probabilidad que existe de que súbitamente llegué a mí, por inspiración divina, algo divertido/interesante/chistosón/culturoso que escribir he decidido escribir una guacareada de datos irrelevantes, el tipo de cosas que me gusta saber de cualquier persona, estupideces sin aparente significado, pequeñeces poco interesantes, por eso adoro al Tuiter (hey, ya me estoy desviando demasiado del tema).

Enjoy:

  • Pongo mi despertador 40 minutos antes de despertarme por eso de que diario me quedo dormido más de la cuenta.
  • Diario me despierto con el pie derecho del lado derecho de la cama, nomás por las moscas.
  • Los sábados pongo el despertador solo para que cuando lo apagué me sienta infinitamente feliz por no tener que ir a la escuela.
  • Desde que el peluquero me dijo que el pelo me estaba adelgazando no me he vuelto a bañar con agua caliente-hirviendo (snif snif).
  • Tengo bóxers, pantalones y playera de "la suerte" que solo utilizo en ocasiones especiales.
  • Odio la muletilla "bueno" y últimamente he tratado de erradicarla por completo de mi vocabulario.
  • Amo las canciones de bodas y me las sé casi todas pero nunca jamás pondría alguna de ellas en mi iPod. Que pena goooooei.
  • Los silencios incómodos –aunque sean por el Messenger- me ponen exageradamente nervioso.
  • Tengo una facilidad im-pre-sio-nan-te para convencer a mis maestros de cualquier cosa.
  • Todos los días en la escuela me compro unas palomitas, una quesadilla y algo de tomar.
  • Soy asquerosamente metódico.
  • Odio la cajeta y la mayonesa.
  • Diario pierdo al menos 40 minutos en leer blogs, tuits y noticias en internet. Luego me ando quejando de que no me da tiempo para la tarea.
  • Es cuestión de tiempo para que alguno de mis compañerillos que no quiero que lea el blog, termine descubriendo el blog.
  • Tengo sospechas de que mi papá sabe que tengo un blog.
  • Últimamente me ha dado por escribir como hablo y hablar como escribo. Ya sé, es horrible eso.
  • No canto tan mal… NOT.
  • Por azares del destino o porque se me salió de repente, varios conocidos/amigos/familiares saben del blog, confieso que es algo incomodo porque no puedo escribir sobre ellos. GRR.
  • Me caga rasurarme.
  • Soy excelente cuidando a niños pequeños y me gusta mucho platicar con ellos.
  • Amo escuchar pláticas ajenas.
  • Tengo un segundo nombre horroroso. Como de Don.
  • Cada que veo a alguien con los mismos lentes que yo me dan ganas de golpearlo.
  • Cuando hablo con mis compañerillos les desespera que a cada rato saque dichos, a mi me encantan.
  • Muchos de mis compañerillos dicen que soy creído, yo digo que son estúpidos. Jo.

Wednesday, November 04, 2009

Quiero tiempo.

Simple.


Quiero ser Hiro Nakamura, el chinojaponés de Heroes que juega con el tiempo a su antojo.

Quiero regresar a Argentina y volver a recorrer Buenos Aires.

Quiero poder dormir hasta el hartazgo.

Quiero tener tiempo para terminar la asquerosa pila de tarea que tengo enfrente.

Quiero detener el tiempo y escribir babosadas para postearlas en el blog.

Quiero poder adelantar el tiempo durante la aburridísima clase de Química.

Quiero detener el tiempo para tontear a gusto y como se debe.

Quiero echarme en la cama a media tarde sin preocuparme por andar malgastando mi tiempo.

Quiero adelantar el calendario hasta Navidad.

Quiero regresar a cuando no tenía que usar 67 chamarras dentro de mi casa.

Quiero que mañana (y todos los días) sea sábado.

Pero no soy Hiro Nakamura, ni Adam Sandler en Click, ni Homero Simpson, ni Martin McFly, ni tengo los trillones de dólares que necesitaría para hacer una máquina del tiempo.


Démet, chét, merde.


O tal vez no se organizar mi tiempo y por eso no puedo terminar mi tarea, siempre es más fácil buscar pretextos estúpidos para justificar mi flojera. No debería estar posteando a tan altas horas de la noche.

Bah.


Tuesday, November 03, 2009

No llores (tanto) por mí Argentina

Tal vez se dieron cuenta que no estuve dos semanas. Si no se dieron cuenta pues les estoy avisando.

Y no, no anduve de parranda.

Estaba en un intercambio escolar a Argentina.

¿Que cómo estuvo?

GREAT y MEGA GREAT, FANTABULOSO, IN-CRE-I-BLE, FANTASTICO.

La idea es ir en una delegación de varios compañerillos, quedarnos una semana en casa de una familia argentina (en este caso en la ciudattt de Rosario) y el resto es una especie de viaje cultural a Buenos Aires. La familia que me tocó era re argentina, 4 hermanos (14 años, 12 años, 8 años y 8 meses) y los papás; todos güeros y con facciones rete europeas (Verán, Rosario es una ciudad relativamente nueva y compuesta, en una vasta mayoría, por inmigrantes italianos y españoles poooor lo tanto todos allá son güeros y altos y hablan como italianos, jojo.), comían harta carne, veían telenovelas argentinas al por mayor, apasionados del futbol y que consideraban a Soda Stereo y a Maradonna dioses.

¿Los argentinos?

Les puedo decir que no son mamones, creídos ni se creen lo máximo, esas son patrañas. Los argentinos son gente visceral, emocionales, intensos, gritones, ruidosos, gente que se deja llevar, como si estuvieran cargados de adrenalina las 24/7, que son groseros nomás cuando tienes que cruzar la calle y que me encanta cómo hablan.

Argentina tiene una especie de decadencia europea única, es una pequeña prueba del "Viejo Continente" en América, es simplemente mag-ní-fi-co. Buenos Aires me pudo fascinar es taaaan bohemio y cool y perfecto para caminar y perderse por horas, además de ser una ciudad "fotogénica" y rebonita.

No daré más detalles del viaje, son cosas ya más personales y que probablemente no les interesen demasiado. Solo diré que Argentina me encantó y ya.

Está bien, no se me alteren, les contaré un poco:

  • He descubierto que mi encanto también sirve en Sudamérica, por alguna extraña razón a las argentinas les parecí extramadamente simpatico y chistoso. Se reian de cualquier babosada que dijera. Of course yo nomás me dejo querer.
  • Entre las patoaventuras de Saúl en el hemisferio sur se encuentran la pelea con una compañerilla por un cargador de iPod, una regadera de la que salía agua amarilla en un hotel porteño, pedazos de carne gigantescos, un jugo de pera realmente adictivo, un perro que estuvo a punto de comerse un "teni", el pelo morado de una compañerilla, una chamarra de cuero que costó trillones de dólares, Saúl enfurecido porque todos tomaban sus lente pa' tomarse fotos y hartas fotos vaciladoras.
  • Anduve de cuida-chamacos. Y es que fui nombrado el segundo al mando, y aunque no cumplí con mi tarea (que era cuidar que no tomaran, fumaran ni se "agarraran" con ningún argentino me di cuenta que andar de cuida-chamacos es un trabajo HO-RRI-BLE.

Ah, y ya tengo Feisbuc. No resultó ser tan malo como pensé, creo, espero.

Los amo bái.

PD: No crean que los posts del FICM se me olvidaron, les di una revisada de ultima hora y estaban HO-RRI-BLES (qué con mi manía por dividir palabras en sílabas, suena bien "luser, goooei") so decidi mejor no publicarlos.